En la 55ta conmemoración del Día Internacional de la Tierra, observamos con urgencia que muchas empresas aún no integran de forma adecuada su relación con el medio ambiente en sus decisiones estratégicas. Esta omisión puede generar una serie de impactos negativos.
Por ejemplo:
- La falta de medición de la huella de carbono podría causar la pérdida de oportunidad de acceder a financiamiento verde.
- Si no se identifican todos los riesgos climáticos, la empresa podría tener daños operacionales y reputacionales, que se traducirán indudablemente en pérdidas financieras.
- El desconocimiento de la normativa ambiental puede derivar en infracciones que conllevan multas y sanciones.
- La falta de trazabilidad en la cadena de valor de las externalidades ambientales podría ocasionar que la empresa incumpla requisitos para mantener certificaciones o perder clientes contra su competencia.
- No evaluar impactos de la empresa sobre la biodiversidad podría causar la pérdida de licencias sociales y legales.
- No conocer los servicios ecosistémicos de la que depende la empresa podría tener riesgos ocultos en el modelo de negocios.
La interdependencia entre empresa y medio ambiente deja de ser opcional y se vuelve estratégica. Es clave para evitar riesgos operacionales, financieros y reputacionales, y para responder a estándares ESG cada vez más exigentes. Reconocer la interdependencia con el entorno permite anticiparse, evaluar impactos y avanzar hacia modelos de negocio más resilientes y sostenibles.
Desde nuestra unidad GreenLab de Dictuc, podemos apoyar a tomar acción en estas temáticas para que tu modelo de negocios se haga cargo de los múltiples riesgos a los que tu empresa podría estar expuesta y garantizar su sostenibilidad en el tiempo.
Además, contamos con laboratorios acreditados para realizar monitoreos ambientales.