Dictuc / Artículos / Noticias / Intoxicaciones por monóxido de carbono ¿Cómo evitarlas?

Todos los artefactos a combustión utilizados en nuestros hogares, ya sean cocinas, estufas o calefones, producen una cierta cantidad de monóxido de carbono el cual, bajo ciertas condiciones, se puede acumular en el aire dentro de un recinto cerrado y alcanzar niveles de concentración peligrosos, que nos pueden provocar desde un simple malestar y hasta la muerte.

Fabián Hormazábal, consultor asociado de Dictuc, explica que el gas licuado, el gas natural y parafina, son combustibles que contienen hidrógeno y carbono en su composición, y por eso se les suele llamar también hidrocarburos (“hidro” por hidrógeno y “carburo” por carbono). Durante la combustión, el hidrógeno y el carbono reaccionan con el oxígeno del aire formando, principalmente, vapor de agua y dióxido de carbono, respectivamente.

Sin embargo, si las condiciones de funcionamiento de los artefactos que utilizan hidrocarburos no es la adecuada, el carbono, además de formar dióxido de carbono, también generará ciertas cantidades de monóxido de carbono, el cual es un producto de combustión incompleta que, si se acumula en el aire por sobre ciertas concentraciones, puede producir desde un simple dolor de cabeza hasta la muerte por intoxicación.

Para evitar que esto ocurra, te presentamos las siguientes recomendaciones:

  • Procurar encender y apagar las estufas a parafina al aire libre, ya que durante estos procesos suelen generar mayor cantidad de contaminantes.
  • Prefiere las estufas con ducto de evacuación de gases hacia el exterior de la vivienda, esto evitará que el monóxido de carbono se acumule dentro de algún recinto.
  • Nunca debes cerrar completamente una habitación que tenga en su interior una estufa a combustión sin ducto de evacuación de gases, ya que la ventilación evita que la concentración de monóxido de carbono alcance valores peligrosos.
  • Los calefones deben estar instalados según la normativa vigente y nunca dentro de un baño.
  • Revisa que el ducto de los calefones no esté en mal estado ni fuera de su lugar. Un ducto dañado o mal instalado puede producir que los productos de combustión se descarguen dentro de la vivienda.
  • Revisa la mecha de las estufas tradicionales a parafina. Una mecha en mal estado producirá una llama de color amarilla y más contaminante.
  • Verifica que la llama de la cocina sea azul y no amarilla, ya que esto significa que la combustión no es la adecuada.
  • Es importante situar las estufas sin ducto en un lugar seguro y ventilado.
  • No use la estufa con otros fines que no sea la de calefaccionar. Secar ropa o calentar agua con ellas es una condición insegura.
  • En caso de sentir malestar (dolor de cabeza, mareos o vómitos) cuando está en funcionamiento un artefacto a combustión, debes apagarlo, ventilar completamente el recinto, llamar a los servicios de urgencia y solicitar la inspección de personal autorizado por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC).

Siguiendo estas recomendaciones, mantendrás un ambiente más limpio y más seguro para ti y toda tu familia.