Cada vez quedan menos días para las celebraciones de Navidad y muchos se preocupan de conseguir los mejores regalos para niños. Sin embargo, se debe tener presente una serie de precauciones para asegurar que el juguete escogido sea el más adecuado y que estén libres de cualquier elemento que podría resultar perjudicial para la salud. A continuación, Dictuc presenta algunos tips para que las compras navideñas puedan hacerse de manera consciente y segura:
Verifica los riesgos y toma precauciones
Al comprar un juguete, el consumidor debe tomar la medida básica de verificar la rotulación que indica el rango de edad al que está dirigido el producto. Algunos productos no son aptos para menores de muy corta edad, ya que pueden contener piezas móviles o pequeñas que pueden derivar en un accidente.
Otros de los principales riesgos tienen que ver con la materialidad del juguete y del alcance para el cual están hechos. Por ejemplo, cuando un producto es desarmable, se debe comprobar que éste cuenta con la resistencia mecánica necesaria para garantizar la seguridad del niño. Por otra parte, el artículo debe tener la robustez y capacidad suficiente para soportar al usuario.
También es importante prevenir los riesgos de incendio o quemaduras, debido a esto, el comprador debe procurar que el juguete no sea inflamable en el medio ambiente del usuario. En el caso de proyectiles, hay que verificar que éstos no sean dañinos para el niño que los usa o para el que recibe el impacto.
Es importante contar con la certificación de expertos
El Reglamento sobre Seguridad de los Juguetes Dto. N° 114 de 2005 establece claramente que el juguete no debe representar ningún riesgo para la salud, ni de lesiones corporales en caso de ingesta, inhalación o en el contacto con la piel, mucosas u ojos. Es por esto que deben estar libres de solventes residuales y tener una cantidad inferior a 170 ppm de tolueno.
Tampoco deben superar los límites de migración de elementos como antimonio, arsénico, bario, cadmio, cromo, plomo, mercurio y selenio. Para evitar encontrar dosis superiores a las establecidas por el reglamento, los fabricantes o importadores de juguetes deben realizar las mediciones físicas y químicas correspondientes.
En este caso, resulta importante contar con una certificación que indique la calidad del producto. La unidad Alimentos y Análisis Químico de Dictuc cuenta con las herramientas necesarias para analizar y/o certificar las características físicas y químicas para juguetes y productos de entretención infantil, procurando siempre cumplir con las normas y reglamentos establecidos para este propósito.
Revisa siempre la rotulación del juguete.
Juan Pablo Molineiro, jefe de Unidad Alimentos y Análisis Químico de Dictuc, menciona que “Si bien la autoridad sanitaria realiza esfuerzos por garantizar la seguridad de los juguetes comercializados en el país, el principal fiscalizador es el usuario que adquiere un producto de estas características en el mercado. Dada la amplia oferta de este tipo de bienes, es muy importante exigir juguetes que contengan al menos la rotulación adecuada y que se hayan realizado los ensayos físicos y químicos para garantizar la seguridad de los niños que los utilizaran”.
Es por este motivo que el rotulado es muy importante para saber el tipo de producto al que se está accediendo. Según el mismo reglamento de seguridad de los juguetes, la señalización debe estar en español y debe indicar obligatoriamente los siguientes datos: nombre genérico del producto (cuando éste no sea plenamente identificable a simple vista por el consumidor), nombre o razón social que incluya el domicilio del productor o responsable de la fabricación o importación del juguete, país de origen del producto, leyenda o símbolo que indique la edad del usuario recomendada por el fabricante y la indicación “advertencia se debe utilizar bajo la vigilancia de un adulto” (cuando sea necesaria esa supervisión).